domingo, 22 de marzo de 2009

DONDE LLEGAREMOS CON LOS MENORES

En primer lugar que destacar ante todo que no intento dar a entender que los jóvenes no tienen que tener derechos, es mas los tienen que tener pero con un poquito de sentido común y intentare explicarme.

Resulta que si le das un tortazo a tu hijo/a, te llega el juez de turno y te lo quita por malos tratos como ya ha pasado algún caso.

Como padres tenemos la obligación de mantenerlos, pagarles estudios y formarlos con la educación adecuada.

Y ahora ya por ultimo es que le den la autoridad de tomar la libre decisión de que si se quedan embarazadas la niñas con 16 años, pueden decidir si abortan o no sin que se enteren los padres, donde estamos llegando, como se puede permitir que una niña de 16 años con el riesgo que eso comporta pueda tomar la decisión a espaldas de los padres, los cuales están ajenos a todos los acontecimientos.

¿Donde están las obligaciones de los hijos con los padres?
¿Donde están los derechos de los padres?
¿Astata donde quieren llegar o pretenden llegar, por un `puñado de votos?

Yo actualmente tengo una niña de 12 años y me da miedo el que pueda pasar mañana, no me hago a la idea de que se pueda realizar entradas a quirófano d estos tipos sin que yo ni la madre nos enteremos.

¿Quién piensa estas leyes?
¿Con que objetivo dictan estas leyes?
¿Por qué en un tema tan serio que entra en juego la vida de la persona, no se realiza un referéndum?

No se pero me da la sensación que estamos perdiendo el norte, con tantos derechos y muy, muy pocas obligaciones y así nos esta yendo.
Salud.

4 comentarios:

Apa Noi dijo...

kiko
esto te lo esplica de cojones, tu colega el Carrillo
yo no puedo, ni lo entiendo.

La casa de Pinel dijo...

kiko muy sencillo, esto es el talante que se necesita para renovar la confianza del votante

Anónimo dijo...

Estos nos hunden que alguien ponga freno

Blas Jesús Sánchez González dijo...

No comparto tus quejas porque haya un exceso de derechos, sino más bien que las comparto por el mal uso que se hace de los mismos y cómo se utilizan.

Los amplían de boca, pero de obra los restringen.

Y, si no, cuando te veas en un juicio rápido por darle un soplamocos a tu hijo/-a, independientemente de que sea bien merecido, verás qué pocas garantías de contradicción te van a dar para defenderte.

Salud.